2013: lo que pudo haber sido y lo que fue

El año que acabará en pocas horas pudo haber sido espectacular. Las bases estaban puestas para poder dar un salto en las aspiraciones y en los objetivos del proyecto deportivo del Betis, pero la realidad ha sido completamente distinta.

Pocos imaginábamos en junio que el Betis fuera a terminar el año como colista de la Primera División. Cuando Jorge Molina mandó a la escuadra en balón que supuso el punto que necesitaba el equipo verdiblanco para sellar su pasaporte europeo, la ilusión y la alegría se desataron entre la fiel afición bética. El Betis había culminado su particular travesía del desierto y parecía que dejaba atrás definitivamente los fantasmas del pasado. Nada más lejos de la realidad. Un pésimo trabajo a la hora de confeccionar la plantilla para la temporada más ilusionante de los últimos años, tiró por la borda todo lo logrado desde julio de 2010. Los fichajes llegados devaluaron deportivamente al Betis, que fue incapaz de competir con garantías desde septiembre.

Como consecuencia de todos estos errores groseros, Mel dejó de ser el entrenador del Betis y Stosic también fue despedido como Director Deportivo. Ahora, el club de Heliópolis, se encomienda a que Garrido y su equipo de ayudantes acierten con los fichajes y le saquen el rendimiento que permita al equipo verdiblanco remontar posiciones en la tabla y evitar el descenso. Será un trabajo arduo y complejo, pero mientras haya vida hay que mantener la esperanza.

Y no solo ha perdido el Betis crédito en lo meramente futbolístico. Institucionalmente también está en crisis. Las voces contrarias al consejo son cada vez más numerosas y sonoras. Si bien la gestión económica es modélica, el fracaso a la hora de invertir lo necesario para crear un equipo de garantías es rotundo. Se une todo esto a las últimas noticias aparecidas en torno a Bosch Valero, que de ser ciertas, debería dimitir de inmediato o, en su defecto, ser sustituido por el Juzgado que instruye el caso judicial en el que está inmerso el club.

Otro de los episodios negativos ha sido protagonizado por los ultras. No es nada nuevo lamentablemente, pero este año se ha llegado demasiado lejos. Han entrado al césped durante un entrenamiento con el consentimiento de Pepe Mel; los gritos y gestos racistas del pasado derbi en Nervión y contra Nosa en el del Villamarín han manchado la imagen de una afición que para nada se ve representada por estos aficionados; y agredieron e insultaron a los simpatizantes del Vitoria de Guimaraes, que se tomaron la justicia por su mano cuando el Betis visitó Portugal y la tragedia se esquivó de manera milagrosa. Esta gente no aprenderá jamás, y bien haría el club en seguir el ejemplo del Real Madrid.

Así que lo que pudo haber sido un año bonito y espectacular, ha derivado en una crisis total y muy grave. Ojala que la entrada del nuevo año traiga un nuevo Betis. Pero tened en cuenta que, a nuestro amado club, hay que quererlo cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite.

Feliz 2014 y VIVA EL BETIS.

Perro flaco, muy flaco

Real Betis Balompié 0 – U. D. Almería 1 (Azeez)

El Betis se hunde en el fondo de la clasificación sin remedio alguno. Frente al Almería volvió a perder y la salvación se aleja hasta los cinco puntos. No mereció salir derrotado el equipo de Garrido, pero es que hasta cuando merece ganar, pierde.

Muy pronto se le torció el partido al Betis. A los cuatro minutos, un lejano tiro de Azeez sorprendió a Sara. El balón, tras tocar en Paulao, despistó al portero bético, que nada pudo hacer para evitar el gol de la victoria almeriense. El Betis intentó con el poco fútbol que atesora revertir la situación y no lo logró. Oportunidades tuvo para ello pero, para colmo de males, se encontraron con un portero que estuvo sensacional. Esteban hizo paradas de mucho mérito ante disparos de Vadillo, Rubén y Molina. Y cuando no llegaba el portero asturiano, aparecía el larguero para impedir el gol de Juan Carlos. En esta ocasión no hubo falta de actitud, ni desidia, ni desinterés, ni apatía. Se confirmó que este equipo está muerto, que no le sale una a derechas no mereciéndolo, y eso es más preocupante aún.

Lo que vino tras el pitido final del árbitro solo se comprende si se siente en verdiblanco. Garrido acertó plenamente al mandar a los jugadores al centro del campo para que oyeran el veredicto de la afición. Y ésta respondió con la categoría que se le supone. Primero bronca a los jugadores, a la directiva y, especialmente, al responsable de haber confeccionado una plantilla que da para sumar diez puntos en diecisiete encuentros. Y luego, cuando todo el que se merecía la reprimenda la había recibido, la afición explotó en cánticos de ánimo, consciente de que sin todos debemos remar en una dirección. Pero para llegar a buen puerto harán falta muchos cambios y fichajes que corrijan las carencias de este equipo.

LO MEJOR: la afición y el gesto de Garrido al final del partido.

LO PEOR: que pierde hasta cuando merece ganar.

Clasificación penosa

Real Betis Balompié 2 (Paulao y Amaya) – Lleida Esportiù 2 (Monforte y Mata)

El Betis se clasificó para los Octavos de Final de la Copa del Rey tras empatar a dos frente al Lleida en un partido que se le fue complicando por la inoperancia bética y el manojo de nervios que es hoy en día este equipo.

Cuando a los diez minutos el marcador reflejaba un 2-0, la goleada se atisbaba en el horizonte. Nada más lejos de la realidad. El Betis empezó a fallar ocasiones y se desmoronó como un castillo de naipes cuando el Lleida hizo el primero. Al equipo de Garrido le entraron más nervios que a un testigo falso y comenzó a jugar de forma errática, con fallos groseros, con unos jugadores que no querían asumir responsabilidades, demostrando así la total carencia de autoestima y amor propio que tienen los futbolistas de esta plantilla. Se agravó la situación cuando, al poco de empezar la segunda mitad, los catalanes lograron empatar el encuentro. Los nervios se tornaron a miedo y terror, ya que un gol del rival eliminaba al Betis. No llegó porque tampoco es que el Lleida hiciera méritos para ellos. Apenas asustó a la insegura retaguardia verdiblanca, que sufre muchísimo ante el más mínimo peligro.

Así se llegó al final de un triste partido, en el que el Betis volvió a demostrar que es un equipo impreciso, fallón y con jugadores de un nivel muy bajo a lo esperado. Vergonzosa forma de pasar a la siguiente ronda, pero hubiera sido peor que un equipo de Segunda B como el Lleida te eliminara. Aquí no se dio esa sorpresa.

LO MEJOR: el golazo de Amaya y el bonito detalle de ala afición catalana, que desplegó una bandera en homenaje a Miki Roqué en el minuto 26 de cada tiempo.

LO PEOR: la penosa imagen que da el Betis, independientemente de quien sea el rival.

Otro ridículo para la colección

Real Sociedad 5 (Agirretxe 2, Elustondo, Griezmann y Xabi Prieto) – Real Betis Balompié 1 (Jorge Molina)

El Betis cosechó un nuevo ridículo en Anoeta. Mantuvo el tipo durante la primera parte pero, en cuanto le apretaron, se descompuso fulminantemente. El tufo a segundazo aumenta jornada tras jornada.

Muy pronto se vio que defensivamente el Betis lo pasaría mal. La Real se aprovechó de la debilidad de la retaguardia verdiblanca, sobre todo de la de Nacho, que exhibe un nivel propio de Tercera División. Por fallos en la marca del malagueño o por descuidar su espalda, llegaron 4 de los 5 goles donostiarras. El primero llegó a los cinco minutos de partido. Reaccionó muy bien el Betis al gol rival. Se hizo dueño del balón y jugó una primera parte muy aceptable. Molina logró el gol del empate y envió el balón al palo poco después. Y tras el descanso todo seguía igual, con el Betis bien plantado y buscando la portería de Bravo, aunque todo cambió en pocos minutos. La Real se vino arriba y empezó a atacar con insistencia. Tras dos jugadas peligrosas logró adelantarse en el marcador con un buen cabezazo tras un saque de esquina. Y ahí se descompuso el Betis. Llegaron el tercero y el cuarto en un santiamén y el quinto ya casi al final del partido. Poco más se puede decir de este partido.

Mejorando defensivamente el Betis tendrá alguna opción de recuperarse de este bache profundo en el que se encuentra. Regalando goles como se han regalado frente a la Real será imposible.

LO MEJOR: el juego en la primera parte.

LO PEOR: la defensa en general y Nacho en particular.

Fichajes o descalabro

Real Betis Balompié 0 – HNK Rijeka 0

El Betis completó un horrendo partido para cerrar la Fase de Grupos de la Europa League. En el sorteo del lunes, el Betis saldrá emparejado con los campeones de grupo de esta fase o frente a Nápoles, Benfica, Basilea o Shakhtar.

Ni tan siquiera el hecho de que el rival fuera inferior hizo que el Betis mejorara y se impusiera en el marcador. A la falta de calidad de muchos jugadores se les ha unido una indolencia y una apatía que dan como resultado la imagen que ofrece el equipo verdiblanco partido tras partido. Qué el problema exclusivamente no era el entrenador lo sabemos todos. El principal mal del Betis reside en una plantilla mal confeccionada para los objetivos que se pretendían alcanzar y para la disputa de tres competiciones. Y con esto va a tener que tirar para adelante Garrido. Con esto y con los más que presumibles fichajes que se harán en breve. Por mucho que el técnico valenciano dijera el día de su presentación que no quería refuerzos, llegarán. Y lo harán porque si no el descenso es seguro. Los centrales y el portero dieron ayer un recital de inseguridad, nervios y falta de ideas alarmante; no hubo un organizador de verdad hasta que Nono entró en el campo; los extremos corren como pollos sin cabeza; y de Chuli, si falla ocasiones como la de ayer, poco podemos esperar. El único que se salva de la quema es Lolo Reyes, que se vació en la presión y fue el único que medio mereció la pena junto a Steinhöfer.  Así es imposible ganar, incluso hasta el Rijeka.

Garrido tiene por delante muchísimo trabajo por hacer. Con una plantilla corta como un fandango y con un ambiente raro como un perro verde, el panorama que se presenta es bastante complicado. Refuercen al equipo y háganlo bien, porque si no, el descenso está garantizado.

LO MEJOR: el partido de Lolo Reyes.

LO PEOR: por encima del nefasto encuentro, la lesión de gravedad de Xavi Torres.

Lógica incompleta

Hace unas pocas horas que el Consejo de Administración del Real Betis ha decidido destituir a Pepe Mel como entrenador del primer equipo verdiblanco y aun no se ha completado el círculo lógico. Me temo que no se hará.

 

La situación de Mel era complicada. Tenía al equipo que entrenaba clasificado en última posición, con dos puntos ganados de los últimos veintisiete y volvió a recibir un varapalo gordísimo en el pasado derbi. Lo lógico era la destitución y así ha sido. De nada ha servido que la afición, mayoritariamente, apoyara a Mel pese a los malos resultados. La decisión la tenían tomada desde hace varios días, quizá tras el derbi, y el empate frente al Rayo ha acelerado el cese.

Pero no hay que quedarse en la situación deportiva del club mirando la tabla clasificatoria. Hay que analizar que efectivos se le han dado a Mel para que obtenga los resultados apetecibles. Jugadores del Evian, Huachipato, Numancia, Recre, Castilla, Atlético Rafaela, Espanyol, Brujas, Basilea, Getafe y Murcia ha venido a reforzar a un club que había logrado clasificarse para la Europa League. La planificación y el diseño de la plantilla ha sido un desastre mayúsculo. Ahí es donde reside el mayor error de Mel: haber tragado con lo que le han traído. ¿A qué esperan Guillén y Bosch para despedir fulminantemente a Vlada Stosic? ¿Qué motivos hay para seguir confiando en el serbio? ¿Por qué si el proyecto deportivo está fracasando solo pagan los platos rotos los del cuerpo técnico? Hay muchas cosas que no entiendo y que necesitan ser explicadas.

Me duele mucho que Mel, con sus fallos, no siga siendo el entrenador del Betis. El madrileño le devolvió la ilusión a una afición muy cansada y hastiada. Hay entrenadores que son ideales para un tipo de club, y Mel lo es para el Betis. Sus últimas palabras han sido ejemplares: denle al que venga el mismo cariño que me habéis dado a mí. Eso solo lo puede decir alguien al que le duele el Betis. Gracias Mel por estos tres años. Suerte y hasta pronto.

La casa de los errores

Real Betis Balompié 2 (Amaya y Verdú) – Rayo Vallecano 2 (Bueno los dos)

El Betis pagó muy caro sus errores ante un rival directísimo y se vio, por ello, privado de una victoria necesaria y que mereció por oportunidades. Los de Mel continúan como colistas de Primera y, con la inseguridad que ofrecen, hacen que las dudas sobre la recuperación sean enormes.

La primera parte fue dominada por completo por el Betis. Presionó bien la salida de balón que pretendía el Rayo y gozó de las mejores ocasiones de gol. Se ha convertido en un problema gravísimo la dificultad que tiene el conjunto verdiblanco para lograr anotar goles. En un córner botado por Nono y cabeceado por Amaya llegó el gol bético. Se le ponía de cara el partido a los nuestros y debieron dejarlo visto para sentencia antes del descanso, pero Molina y Salva Sevilla no acertaron en sus ocasiones. Tras el descansó llegó otra clara ocasión, pero el cabezazo de Rubén Castro se topó con el larguero. En la siguiente jugada, el Rayo empató al aprovechar Bueno un desastroso despeje de Sara. Con las tablas en el marcador, el juego del Betis se volvió infame. Las imprecisiones, el nerviosismo y el miedo sobrevolaban Heliópolis y fueron la tónica general del juego bético.

Pero por esas cosas que pasan, cuando peor estaba el Betis y los más pesimistas veían peligrar hasta el punto que se tenía, llegó el gol de Verdú, que aprovechó otro despeje defectuoso de un portero, aunque esta vez, favorable a nuestros intereses. Quedaban diez minutos más el descuento para el final del partido. La victoria no debía escaparse. Rubén Castro tuvo en sus botas el tercero en dos ocasiones muy claras, pero no acertó el canario. Y pasó que, cuando ya el cuarto árbitro había mostrado el marcador electrónico con el tiempo de descuento, un fallo grosero de Figueras al permitir que le ganaran las espaldas con una facilidad esperpéntica, dio origen al empate rayista, otra vez obra de Bueno.

Con este cúmulo de errores es imposible remontar el vuelo. El futuro cada vez es más desalentador y oscuro. El tufo a segundazo es mayor conforme pasan los partidos. A ver cómo sale el Betis de este laberinto mortal.

LO MEJOR: el pundonor y la entrega de Nono.

LO PEOR: los groseros fallos que han impedido una victoria muy necesaria.

Derrotado y clasificado

Olympique de Lyon 1 (Gomis) – Real Betis Balompié 0

Cayó el Betis en Lyon en un partido gris y frío en el que los de Mel volvieron a demostrar que están negados de cara a gol. Pese a la derrota, los verdiblancos se clasifican para la siguiente ronda de la Europa league al no pasar del empate el Vitoria de Guimarães en Rijeka.

Como hemos dicho, el partido fue gris y frío. El Betis apenas enlazaba tres pases seguidos y solo un chut de Salva Sevilla y otro de Chuli llevaron algo de peligro al área rival. Cedrick cada día se parece más a Odonkor y solo corre; Verdú volvió a parecer un futbolista retirado que un profesional en activo; Salva Sevilla no encontró jamás un pase decisivo; Juanfran aportó muy poquita cosa; y Nacho en su línea discreta. Los demás cumplieron sin más, salvo el portero, que sí estuvo muy bien. Sin hacer muchos alardes de buen juego y mostrar una calidad superior a la del Betis, el conjunto francés si daba una mayor impresión de peligro. Apunto estuvo Lacazette y Briand de anotar el primero antes del descanso, pero Andersen estuvo providencial.

Salió el Betis más activo, buscando con más ahínco la portería rival. En una desastrosa cesión a Vercoutre, Chuli tuvo el gol en sus botas al adelantarse al portero galo, pero su chut se estrelló en el poste. Poco después llegó el gol del Olympique tras una gran jugada entre Gorcouff, Lacazette y Gomis. Con el partido cuesta arriba, Mel hizo debutar a Pepelu, pero el Betis siguió sin generar peligro alguno. Solo al final estuvo a punto de llegar el empate en un chut de Steinhöfer que se fue a córner tras desviar un defensa el disparo. En esa jugada, debió señalar penalti a favor del Betis por unas manos claras de un jugador francés.

Por lo menos el Betis no se tendrá que jugar nada en el último partido de la fase de grupos de la Europa League y podrá centrarse en el verdadero objetivo de la temporada hasta febrero: la permanencia en Primera División.

LO MEJOR: la clasificación a la siguiente ronda.

LO PEOR: la alarmante incapacidad para conseguir goles.

Se acabaron las palabras

Es hora de actuar. Es el momento de tomar decisiones firmes y contundentes. Y no sólo en el ámbito deportivo. Actúen o la degradación deportiva e institucional del Betis será catastrófica.

Está claro que la planificación deportiva ha sido errónea. Los fichajes que han llegado no igualan las prestaciones de los que se han marchado. Queda poco más de un mes para que se abra el mercado y hay que moverse rápidamente. La plantilla necesita un mínimo de cuatro fichajes que ayuden a revertir la situación actual. Como todas las fichas están cubiertas, habrá que dar bajas, traspasar y/o ceder jugadores. ¿A quién? Pues, en mi opinión, está claro. Brian Rodríguez ha demostrado que no tiene nivel para el Betis; Chica parece sentenciado tras su expulsión frente al Levante y a Paulao puede que le pase igual; y Steinhöfer también tiene muchas papeletas por su escasa aportación. Ya tienen cuatro nombres. ¿Sus sustitutos? Un delantero, un centrocampista, un defensa central  y un lateral derecho.

Porque la otra opción para intentar cambiar la dinámica de resultados negativos sería la de cesar a Pepe Mel. Vale, y ¿a quién traemos? ¿Qué entrenadores hay que ofrezcan más garantías que Mel? ¿Abel? ¿Lotina? ¿Víctor Fernández otra vez? Quién, quién hay. ¿Vamos a repatriar de Ucrania a Juande Ramos? ¿Marcelo Bielsa querrá venir? ¿Hay dinero para estos dos últimos técnicos? En lugar de cambiar al que está en el banquillo habría que prescindir del que está en el despacho. Dijo Bosch que Stosic iba a renovar en breve su contrato, que expira el próximo 30 de junio. Error. Espero que esto no ocurra. No es lógico que se haya marchado o despedido a varios integrantes de la Dirección Deportiva y que no se vea salpicado su máximo representante. Vlada Stosic debe recoger sus cosas, cuanto antes mejor, y que el club busque y acierte con el nuevo Director Deportivo.

Y otro ámbito en el que es necesaria una actuación contundente y sin miramientos es en el caso de los aficionados racistas que han salido en la prensa de medio mundo. Me parece muy bien que el Betis publique varios tweets condenando el racismo y la violencia. Es de recibo hacerlo. Pero lo que hay que hacer (ojo, que no se sí se está haciendo) es identificar a los que gritaron haciendo el mono y al energúmeno que les acompañaba realizando el saludo fascista y expulsarlos del club si son socios e impedirles la entrada al Villamarín y a otros recintos deportivos. Hay que ser contundentes con esta gente. He leído, en foros de webs dedicadas al Betis, que los gritos y gestos racistas iban dirigidos contra Mbia y no contra Paulao. Y qué más da, como si iban dirigidos a M.A. Barracus o al Rey Mago Baltazar. Lo deleznable es hacer gestos y cánticos xenófobos.

Así que se acabaron las palabras. Yo quiero hechos y de inmediato. Estoy cansado de discursos bonitos que luego nada deparan. Hechos, señores dirigentes del Betis. Hechos y decisiones.

Esto no lo arregla ni los Supporters

Sevilla F. C. 4 (Bacca, Mbia, Vitolo e Iborra) – Real Betis Balompié 0

Nuevo ridículo del Betis en Nervión. Nueva muestra de endeblez mental y competitiva de un equipo que debe reaccionar pronto o el descenso de categoría empezará a ser una realidad.

Este año mejoró el planteamiento de Mel en el Pizjuán. Fueron casi dos los minutos que aguantó el Betis con el marcador igualado. Tras el mazazo inicial, tardó en reaccionar veinte minutos. A partir de ese instante se adueñó del partido y debió empatarlo, pero pecó de torpe e ingenuo y se topó con el poste. Al palo fue un chut fortísimo de Nono, y la torpeza llegó de la mano de Paulao, que protestó una falta a favor y le costó la amonestación. Poco después cometió una clara falta que le supuso la segunda amarilla y dejó con diez a su equipo. Por cierto, en las imágenes de televisión se vio claramente a dos aficionados del Betis realizar gritos racistas en contra de Paulao. Que se investigue y que se tomen medidas. En el lanzamiento de esa falta llegó la sentencia con el gol de Mbia. 2-0 y uno menos. La derrota era segura y solo el consuelo de no sufrir una humillación fue el estímulo del Betis. Llegó el tercero con un mundo por delante y luego el cuarto. Y no llegó el quinto porque no hubo tiempo para más. Otro bochorno, otro ridículo estrepitoso.

Ahora hay que confiar en que los Supporters vuelvan a dialogar con Mel y los capitanes. Desde que los ultras hablaron por vez primera, el Betis ha sumado un punto de doce posibles. Su charla ha surtido el efecto esperado. Ellos son la solución.

LO MEJOR: que sólo fueron

LO PEOR: todo.

Su primera vez en el Villamarín

El pasado domingo cumplí un sueño: llevé por vez primera a mi hija Alba al Villamarín. Y además colaboramos con una causa benéfica muy necesaria a favor de los niños que padecen cáncer.

Llevaba tiempo deseando llevar a Alba a estadio del Betis. Ella todavía no entiende de qué va todo este circo que tanto le gusta a su padre. Con el tiempo lo entenderá y, espero, que sea de manera inteligente, dándole la importancia que se merece, que no es otra que la de un bonito y apasionante entretenimiento cargado de sentimiento para que sea emotivo y más placentero y, como somos del Betis, más sufrido. Pero para todo esto todavía quedan algunos años. De momento, con su inocencia y su felicidad infinita, disfruta al máximo de cada cosa nueva que descubre. Le fascinó ver a tanta gente cantando y tocando las palmas; saltó y bailó como una hincha más cuando por megafonía pusieron el “oe, mucho Betis eh” con la música de los Pet Shop Boys; recorrió la grada de Preferencia unas cuantas veces; comió pipas y gusanitos con su amiga Claudia y su tito Joaquín; y saludaba en la distancia a Palmerín. Al padre, obviamente, se le cayó la baba al suelo viendo como su hija disfrutaba de una bonita mañana en el Villamarín. Y también disfrute viendo a Gordillo por la banda con el tres a la espalda y las medias caídas.

Dentro de unos años, si ella quiere, iremos cada domingo de partido a Heliópolis para ver a nuestro Betis del alma. No pienso obligarla a que profese la fe verdiblanca. No voy a imponerle que sea bética. Le daré a elegir: o Betis, u otro deporte. Elegirá sabiamente.

Buitres despechados

Nuevamente se pasa por este blog J. J. Barquín para opinar, acertadamente desde mi punto de vista, sobre un periodista que se está cubriendo de gloria cada vez que habla o escribe.

Decía mi abuela que no hay nada peor en este mundo que un “piojo resucitao”. Se refería a ese tipo de persona que por avatares de la vida mira por encima del hombro cuando antes vivía como el resto de los mortales. Creo que después de ver en TeleSevilla varios programas de Con las botas puestas, podemos acuñar otro término: no hay nada peor que un “bético despechao”.

En estos momentos, esa figura la encarna de manera sobresaliente y patética, el periodista Javier Mérida, que tras no ascender a los altares de la comunicación verdiblanca despotrica, de forma resentida, de todo lo que tenga que ver con su equipo del alma. Tras varios programas dando a diestro y siniestro, repartiendo estopa a todos los órganos del club, el pasado lunes se vino arriba y termino por acusar a la afición del Real Betis de ser sumisa y complaciente por cantar el himno del club cuando se estaba perdiendo 0-4 contra el Barca el pasado Domingo. Lo que para todos los béticos fue un emocionante gesto de apoyo, fidelidad y amor a unos colores, destacado incluso por toda la prensa nacional como claro ejemplo de lo que es y significa la afición del Real Betis, para este sectario periodista fue un ejercicio de sumisión y complacencia. Incluso, su osadía llego a tal extremo, que fue capaz de afirmar que la gestión económica que está haciendo el actual consejo es mucho peor que la de anteriores equipos directivos, incluido el de Ruiz de Lopera.

 

Siendo malvado uno podría pensar que el insigne Manolo Castaño le ha prometido ser jefe de prensa si le hace una campañita contra los actuales mandatarios para remover este río en calma es el Betis actual. No quiero ser malo, no quiero ser retorcido aunque también decía mi abuela eso de “piensa mal y acertarás”. Creo que se avecinan tiempos convulsos en los que los béticos deberán estar muy atentos a los movimientos y acciones de ciertos personajes dañinos que rondan como buitres por los alrededores de la Palmera.

 

PD: Cuando la jueza Alaya puso en la planta noble de la Palmera a José Antonio Bosch fue muy criticado por una frase: vengo a salvar al Betis de los béticos. Creo que no se entendió el profundo mensaje que el jurista intentaba transmitir, ya que tras una etapa ignominiosa y humillante para el beticismo, su intención era sanear el club de la ruina en la que lo habían instalado Lopera y su tropa y velar para que no volvieran a entrar en la institución béticos con la intención de aprovecharse del Betis. De esos buitres hablamos.

J. J. Barquín

Derrota que marca el camino

Real Betis Balompié 1 (Jorge Molina de penalti) – F. C. Barcelona 4 (Neymar, Pedro y 2 de Cesc)

Goleada del Barcelona en el Villamarín que deja al Betis colista de la Liga BBVA. Pese al resultado, el equipo dio una buena imagen y se ganó el respeto de la afición. La pegada de los culés decidió el partido.

Y es que hasta que Neymar y Pedro, en los minutos 35 y 36, pusieron el 0-2 en el marcador, el Betis tenía maniatado al líder de Primera y había gozado de las mejores ocasiones de gol. Víctor Valdés evitó que su equipo tuviera que remontar si quería ganar el partido. El portero catalán estuvo sensacional ante Juan Carlos y Molina. El juego de los de Mel fue bastante bueno: veloz, vertical e inteligente. Pero la diferencia está en la calidad. El Betis tiene muchísima menos que el Barcelona, y por ahí perdió el partido el equipo verdiblanco. Y eso que apenas pudieron contar los blaugranas con Messi, que se lesionó pronto. El argentino es una sombra del jugador de la temporada pasada. Sin Leo, fue Neymar el que abrió la lata. Sin tiempo para reaccionar, una acción afortunada de Pedro dio lugar al segundo gol catalán. El canario mandó un pase a Neymar y le salió un autopase que lo dejó solo ante Sara. A pesar de la ventaja clara del Barça, el Betis salió dispuesto a morder y a morir matando. Verdú anduvo cerca del gol con un chut que salió desviado y Nono se topó con el poste. Y pasó que Cesc en la primera que tuvo hizo el tercero y luego el cuarto. Ya al final, con la afición entregada y animando al Betis, llegó el gol de Molina al transformar un penalti.

El camino está marcado. La actitud, el ímpetu y las ganas de hoy deben ser la tónica general con la que el Betis afronte los partidos. Así y solo así conseguirá el club bético salir del pozo en el que se encuentra.

LO MEJOR: la actitud del equipo.

LO PEOR: la falta de acierto de cara a gol.

Justicia in extremis

Vitoria de Guimaraes 0 – Real Betis Balompié 1 (Chuli)

Merecidísima victoria del Betis en Guimaraes que deja el pase a la siguiente ronda de la Europa League a tiro de piedra. Los de Mel fueron muy superiores a su rival. Caro cumplió con nota alta su debut europeo.

Desde primera hora, los verdiblancos se adueñaron del centro del campo y manejaron el juego. Torres, Nono y Verdú se impusieron con total claridad a sus contrincantes en la medular. Solo al final de la primera parte el Vitoria se zafó del dominio bético y mandó en el partido. Sin ocasiones que reseñar en la primera mitad, salvo un chut de Juan Carlos, se pasó al segundo tiempo, donde el Betis fue tremendamente superior al rival. Se agudizó la superioridad con la entrada de Jorge Molina por Brian. El uruguayo sigue sin demostrar algo positivo. Con el de Alcoy sobre el césped empezaron a llegar ocasiones de gol, falladas por la falta de calidad y tranquilidad que tiene el Betis a la hora de definir. El reloj corría y los béticos se desesperaban porque no llegaba el gol. El dominio era absoluto, con Nono y Verdú jugando a sus anchas. Pero no llegaba el ansiado tanto, que llegó cuando pasaban diez segundos de los tres minutos de descuento que había dado el árbitro. Un gran pase al hueco de Verdú lo aprovechó Chuli para mandarlo a gol. La explosión de alegría de los jugadores y de la afición fue tremenda.

Con esta victoria, el Betis casi se asegura el pase a la siguiente ronda. Lo tendrá hecho si suma un punto en los dos partidos que restan. Esperemos que esto sirva para revertir la situación en la Liga y la dinámica de resultados y el estado de ánimo del Betis mejoren.

LO MEJOR: la victoria y la mejoría en el juego.

LO PEOR: la escasa aportación de Brian.

La triste realidad del Betis

Málaga C. F. 3 (Santa Cruz, Eliseu y Samuel) – Real Betis Balompié 2 (Verdú y Jordi)

Dolorosa e injusta derrota del Betis en La Rosaleda en un partido que debió ganar. No lo hizo por una simple, sencilla y triste razón: la falta de calidad de los jugadores verdiblancos a la hora de definir ante la portería rival.

El equipo de Mel fue de menos a más en el partido. Empezó con muchas dudas y muchas imprecisiones, en una de ellas llegó el gol de Santa Cruz, que cabeceó hasta en dos ocasiones en el área pequeña sin la oposición de los defensas béticos y de un dubitativo Andersen. Reaccionó el Betis y empezó a adueñarse de la pelota. Nono y Verdú conectaron bien y el juego de los verdiblancos fue creciendo. Llegó el empate con un magistral lanzamiento de falta de Verdú. El resultado se igualaba y hacía justicia con los béticos. Recién empezada la segunda mitad Perquis tuvo que ser evacuado en ambulancia tras un fuerte golpe con un rival. Llegaron los mejores minutos del Betis, con contragolpes bien empezados que no tuvieron la resolución deseada. En uno de ellos, Sergio Sánchez cometió un clamoroso penalti sobre Vadillo en las mismas barbas del árbitro, que se hizo el loco de manera descarada. A continuación llegó el gol de Eliseu, y sin tiempo para lamentarse, Jordi conectó un cabezazo tras una falta lateral y ponía de nuevo las tablas en el marcador. Debió el Betis ganar el partido en una jugada en la que Steinhoffer y Molina se quedaron solos delante de Caballero, pero el alemán mando un ridículo pase que no pudo ser aprovechado por el delantero de Alcoy. El Betis perdonó y no lo hizo el Málaga, que se aprovechó de otro error de Steinhoffer (¿en qué diablos pensaba Pepe Mel cuando sacó al alemán?) para lograr el gol de la victoria tras un serie de rechaces afortunados dentro del área bética.

A perro flaco todo se le vuelven pulgas. El Betis tiene una colección. Tanto tiene, que si no lo espulgan rápidamente, se va a ver en un túnel muy muy oscuro con una sola salida: la Segunda División.

LO MEJOR: que tuvo la victoria en sus manos.

LO PEOR: no saber ganar el partido.

Actitud, sólo actitud

Real Betis Balompié 0 – Levante U. D. 0

El Betis sigue sin conseguir una victoria que necesita como el agua. Frente al Levante fue superior pese a jugar con un futbolista menos durante una hora de juego. Molina falló dos penaltis.

Los de Mel controlaron el partido sin grandes sobresaltos salvo en alguna jugada aislada en la segunda parte. No le afectó la absurda expulsión de Chica. El lateral catalán estuvo muy torpe en la acción que le supuso la segunda amarilla. Con un Levante practicando un fútbol rácano y propio de cloacas pestilentes, los verdiblanco movieron la pelota con facilidad pero sin acierto y puntería en los metros finales. Cierto es que el árbitro, que acertó en la expulsión, se equivocó gravemente al señalar un fuera de juego inexistente en una jugada que acabó en gol de Jorge Molina.

Los cambios le dieron al Betis un plus de chispa. Vadillo, Cedrick y Nono mejoraron las prestaciones de Chuli, Juan Carlos y Verdú. Tras la ocasión más clara del Levante, el Betis montó un contragolpe que acabó en penalti sobre Jorge Molina. El propio delantero fue el encargado de lanzarlo y de fallarlo dos veces. El primer lanzamiento lo mandó a repetir el juez de línea por considerar, acertadamente, que el portero se adelantó demasiado. Volvió Molina a lanzar y se lo detuvo nuevamente Navas. El portero costarricense se convirtió en el protagonista principal de su equipo tras realizar una gran parada a un buen tiro de Vadillo.

El resultado no se movió y el punto supo a poco a un Betis que, por lo menos, tiró de amor propio y casta. Cuando la calidad falta, la actitud y la entrega son claves. De momento hemos de conformarnos con eso. Pero urge ganar.

LO MEJOR: la actitud del equipo.

LO PEOR: la absurda expulsión de Chica y los dos penaltis de Molina.

Segundazo a la vista

Atlético de Madrid 5 (Oliver, 2 de Villa, Diego Costa y Gabi) – Real Betis Balompié 0

Contundente derrota en el Calderón de un pobre Betis. El equipo de Mel sigue sin parecerse a un conjunto de fútbol digno y fue un juguetito en manos de los colchoneros. Los verdiblancos caen al descenso por vez primera desde que el madrileño entrena al Betis.

A los catorce segundos el Atlético le mostró al Betis cuál era su destino en el partido: la derrota. Oliver aprovechó la escasa contundencia de la zaga bética para dejar el partido encarrilado. Cierto es que durante la primera mitad, fueron los de Mel los que manejaron la pelota, pero fue un dominio estéril y falso. Jamás profundizó e inquietó a Courtais. Los de Simeone esperaban bien agazapados a contragolpes que dejaran finiquitado el encuentro, pero esta circunstancia no se dio hasta que los equipos volvieron de los vestuarios. Ahí fue cuando el Atlético mostró todo su potencial y pasó por encima de un pseudo equipo de fútbol.

Puede que el titular de esta breve crónica sea precipitado y tremendista, pero es lo que pienso. Mel no da con la tecla y no es capaz de exprimir a unos futbolistas que no dan para más. No es que se acerquen curvas, es que nos hemos caído por un barranco. Ojala encontremos un lugar para agarrarnos.

LO MEJOR: nada

LO PEOR: el tufo a descenso sonado que desprende el Betis.

La larga sombra de Jabubo

Magnífica colaboración de J. J. Barquín. Su opinión sobre la actualidad del club verdiblanco siempre es bien recibida en este blog.

Tardará el Betis en soltar lastre con las miserias que se instalaron en la calle Jabugo. Es una penitencia que llevaremos mucho tiempo. Y con las alegrías y miserias de un juego llamado fútbol, la prensa oportunista e interesada sigue haciendo caja con las comparaciones.

Los Almansa, Ocaña, Espina y –sobre todo- Javier Mérida siguen intentando comparar el Betis de Lopera con el actual. Y no se dejen engañar, no se parecen en nada. El Betis de Lopera no hace falta ni explicarlo, ni recordarlo. El presente tampoco. Puede que la gestión no sea inmaculada y se habrán cometido errores pero este Betis no tiene nada que ver con el del pasado. El problema es que desde que a un señor se le cerraron las puertas del gabinete de comunicación del club, desde que no pudo alcanzar su sueño de ser jefe de prensa del Real Betis, la campaña de desprestigio de los actuales gestores no tiene parangón. Todo es un desastre, la calamidad se ha apropiado del Betis y, en poco tiempo, este Betis será mucho peor que el de un señor que nos llevó al abismo, deportivo y financiero. En breve, Bosch, Guillén y el actual consejo serán el diablo en persona. Lo último, que Bosch ha beneficiado a un despacho de abogados con “al menos, un cuarto de millón de euros” en una demanda de acción de responsabilidad presentada contra los que eran los administradores del club en 2010 y que ha sido derivada a otro juzgado y no perdida como aseguraron, mintiendo, desde varios  medios.

Esperemos que la afición del Betis sea crítica y no se trague todo lo que lee o escucha porque con tanta intoxicación periodística harán bueno a Larriba.

J. J. Barquín

Tan sólo un magnífico resultado

Real Betis Balompié 1 (Vadillo) – Vitoria de Guimaraes 0

El Betis sumó su primera victoria en la Fase de Grupos de la Europa League pese al mal partido realizado. El juego fue similar al de las últimas ocasiones, con la diferencia del resultado.

Y es que las dudas, el desacierto, las impresiones y la falta de profundidad en ataque siguieron siendo habituales en el juego del conjunto de Mel. Mejoró algo con respecto a otros partidos, pero sin que la diferencia fuera abismal. La mejoría fue leve, producto de la posición de Juanfran en el lateral derecho y de la entrada en mediocampo de Nosa, que pese a su irregularidad, siempre aporta llegada y contundencia física a la medular. Por suerte, el rival tampoco tuvo su mejor día. Sólo destacó el golpeo a balón parado de Tiago Rodrigues y la solvencia defensiva de Ba. El central derrochó velocidad, colocación, contundencia y anticipación. A tener muy en cuenta.

Con empate se llegó al descanso y a la vuelta de éste llegó el gol de la victoria. Cuatro minutos de la segunda parte pasaban cuando una gran combinación entre Verdú y Vadillo terminó con un gran disparo colocado del canterano bético. El golazo sirvió para tranquilizar un poco el ánimo de los béticos. Buscó el Betis contragolpes para sentenciar el partido, pero de nuevo apareció la imprecisión en el juego. Verdú ralentiza demasiado la velocidad de la pelota y se muestra muy fallón en los pases. Nono, en su debut de la temporada, estuvo aseado y correcto, demostrando que puede y debe tener minutos. El Vitoria se fue creciendo y tuvo tres ocasiones clarísimas para el empate. Primero sin portero y luego en dos remates que Andersen despejó notablemente. Cedrick la tuvo para sentenciar el encuentro, pero erró frente al guardameta luso.

Se llegó al final sin más sobresaltos y con la alegría del reencuentro con la victoria. Ahora deberá el Betis sacar algo positivo de Portugal para dar un paso definitivo hacia la siguiente ronda europea.

LO MEJOR: el golazo de Vadillo.

LO PEOR: las indecisiones y los errores en el juego.

Vulgar y ramplón

Real Betis Balompié 1 (Jorge Molina) – Elche C. F. 2 (Del Moral y Fidel)

El Betis de esta temporada va a sufrir de lo lindo si no cambian radicalmente las cosas. Frente al Elche mostró de nuevo un nivel vulgar y ramplón. No supo remontar ante un equipo que jugó media parte con un futbolista menos.

Dos jugadas bien trenzadas en ataque por el conjunto ilicitano sirvieron para poner en el marcador un descorazonador 0-2 en poco más de media hora. No le hizo falta al Elche realizar un derroche físico y de buen juego. Le bastó con saber estar plantado en el campo y esperar a que llegara su oportunidad. Mientras, el Betis se perdía en jugadas insulsas, faltas de brío y profundidad. El gol de Molina, en fuera de juego, puso algo de emoción e interés, pero no está el Betis para remontadas épicas.

El equipo está roto. Molina está muy solo arriba y desasistido por completo. Los extremos no desbordan y el centro del campo no genera un juego veloz. No está conjuntado el equipo y encima está fallando en defensa. Con este panorama, y una vez dado un razonable margen de tiempo, las conclusiones son desalentadoras. El Betis tiene que cambiar por completo o va a pasar muchísimos apuros. Mel aún no ha encontrado un once de garantías. Busca muchas alternativas pero ninguna le funciona. Los verdiblancos se muestran incapaces y ni siquiera el hecho de ser uno más sobre el césped le ha servido para ser superior.  

La situación es complicada y preocupante. No hay que dramatizar, pero las luces de alerta se han encendido muy pronto. Quizá ese aspecto sea el único positivo: que hay mucho tiempo aun para mejorar. Háganlo.

LO MEJOR: como en Getafe, nada de nada.

LO PEOR: la sensación de equipo vulgar y ramplón.

Pues si Mel, vergonzoso

Getafe F. C. 3 (2 de Pedro León y Colunga) – Real Betis Balompié 1 (Rafa en propia puerta)

Dijo Mel en la rueda de prensa tras el bochornoso partido en el Alfonso Pérez que como socio del Betis había sentido vergüenza. Creo que es la mejor palabra que define lo hecho por el Real Betis en Getafe.

Desde que el balón comenzó a rodar se vio claramente    que el equipo verdiblanco no andaba inmerso en la dinámica competitiva que exige un partido de Liga. El conjunto madrileño se encontraba muy cómodo porque el Betis jamás le exigió y le apretó los tornillos. Para mayor desgracia bética, se dio la circunstancia de que Pedro León anduviera inspirado. El murciano vio a Sara ganando metros para un posible centro al área y la envió a gol desde Leganés. El tanto fue un mazazo para un equipo que se mostró indolente y sin alma, y así, en menos de diez minutos, le cayeron el segundo y el tercero. El partido estaba totalmente finiquitado, porque los milagros existen a cuentagotas y menos cuando la actitud de los jugadores es pésima.

Movió el banquillo Pepe Mel tras el descanso para jugar con dos extremos natos. Mejoró el Betis porque empeorar era imposible. Llegó el gol tras una falta botada por Verdú (muy mal y lento en todo el partido) que se benefició del despeje defectuoso de Rafa. Quedaban muchos minutos por delante, pero por mucho que lo intentó Cedrick, las ocasiones no fueron lo suficientemente claras y el empuje del Betis no fue lo intenso como para lograr una remontada épica.

En las dos semanas que quedan para el próximo enfrentamiento liguero, debe Mel modificar varios aspectos. Esperemos que Rubén Castro esté recuperado del todo y que el equipo muestre la solvencia necesaria para no tener que pasar apuros. A trabajar.

LO MEJOR: la afición bética que estuvo en las gradas del Alfonso Pérez.

LO PEOR: el partido del Real Betis.

Decepcionante empate en Croacia

NHK Rijeka 1 (Benko) – Real Betis Balompié 1 (Cedrick)

El Betis se vuelve de tierras croatas con un triste empate que sabe a poco porque el rival era manifiestamente inferior. Dominó el encuentro en la mayoría de los noventa minutos, pero se mostró inoperante de cara a gol.

Empezó el partido mal, con el Rijeka envalentonado y el Betis sin saber si estaban jugando ya o todavía calentaban. Y en esas llegó el gol croata. Un desbarajuste defensivo fue aprovechado por Benko, que al encontrarse sin marcaje, conectó una cómoda volea ante la que nada pudo hacer Andersen. Pintaban mal las cosas, pero el Betis reaccionó de inmediato. En una jugada embarullada y tras un par de rebotes, la pelota fue a parar al pecho de Cedrick para que éste se la acomodara y poder mandarla a la portería rival con un fuerte derechazo que se coló por la escuadra. Un golazo. Fue entonces cuando el conjunto que dispuso Pepe Mel (con 9 cambios) se mostró más cómodo sobre el césped. Tuvo un par de ocasiones para marcar el segundo, pero fueron respondidas bien por el portero del Rijeka.

A la vuelta de los vestuarios, el partido viró por completo. Los verdiblancos (hoy verdinegros) salieron nuevamente atolondrados y los croatas a punto estuvieron de adelantarse en el marcador por segunda vez. La entrada de Nosa fue clave para que el control del juego volviera a ser de los de Mel, pero jamás le dieron la velocidad necesaria a la pelota para que ésta acabara en el mismo lugar al que la mandó Cedrick. Nosa tuvo la más clara, pero un defensa metió el pie en el último momento, cuando el nigeriano se disponía a empujarla a gol. El cambio de Molina por Braian llegó demasiado tarde, ya que el uruguayo jamás dio la sensación de poder inquietar al rival.

El punto obliga al Betis a sacar algo de los otros dos desplazamientos que aún le queda y, por supuesto, ganar los dos partidos del Villamarín. El partido de hoy no ha servido para que los menos habituales aprieten a Mel. Un pena.

LO MEJOR: el golazo de Cedrick.

LO PEOR: no haber ganado ante un rival bastante inferior.

Sufrimiento grato

Real Betis Balompié 1 (Nosa) – Villarreal C. F. 0

El Betis se llevó un triunfo sufrido ante un rival que llegó invicto al Villamarín. El partido fue intenso, disputado e igualado, que se decidió por el acierto de Nosa. El Villarreal pidió dos penaltis que bien pudo haber pitado el árbitro.

Sin ser claro y agobiante, el dominio del partido fue del conjunto amarillo. El Betis esperaba bien arropadito para salir al contragolpe. Mel prescindió de un extremo (el izquierdo) para tirar levemente a Nosa hacia ese costado. Dio descanso a Torres y apostó por Reyes, y el chileno estuvo muy acertado en la presión y el corte. Sara evitó con dos buenas intervenciones que el equipo de Marcelino se adelantara en el marcador. El portero argentino está atravesando un gran momento, mostrándose muy seguro en todas sus acciones.

Las ocasiones del Villarreal fueron respondidas por Chica y Amaya, que se encontraron con las manos de Asenjo. A diez minutos del descanso llegó el gol de la victoria bética. Un tiro de Vadillo fue rechazado por un defensa rival, el balón llegó a Verdú para que éste batiera al portero villarrealense, pero Asenjo lo evitó despejando el balón. El despeje fue a parar a Nosa para que el nigeriano la empujara a puerta vacía.

En la segunda mitad se acrecentó la búsqueda de contragolpes por parte del Betis. Lamentablemente no aprovechó el conjunto de Mel esas jugadas. Solo una acabó en un mano a mano de Verdú frente a Asenjo, que volvió a evitar otro gol verdiblanco. El Villarreal buscó la portería de Nosa, pero lo hizo sin mucho acierto. Ya al final, se pidió penalti de Amaya, aunque parece que el central madrileño toca antes el balón. Si pudo pitar una pena máxima en la primera parte tras un claro empujón de Reyes  Cani.

Tras el empate ante el Granada y la derrota en Bilbao, urgía ganar para evitar males mayores. Se hizo con sufrimiento y trabajando mucho. Aún sin la brillantez de otros partidos, el bético se habrá ido contento por la entrega y el coraje del equipo. Así también vale ganar.

LO MEJOR: que se ha sabido sufrir y trabajar para ganar.

LO PEOR: que se podría haber controlado más el partido.

 

Justa derrota en Bilbao

Athletic Club de Bilbao 2 (De Marcos y San José) – Real Betis Balompié 1 (Jorge Molina)

Merecida derrota del Betis en Bilbao ante un Athletic que siempre fue superior y que debió ganar con menos apuros. Molina adelantó al conjunto verdiblanco, pero los vascos remontaron a falta de diez minutos.

El partido fue un monólogo de los bilbaínos. Controlaron a su antojo el ritmo del encuentro y le imprimieron una velocidad superior a la que ejerció el Betis. Aun así, la primera oportunidad del partido fue para Chuli, pero su chut lo atrapó sin problema Iraizoz. El Athletic se volcó hacia el área bética y mandó dos balones al larguero. El gol se veía venir por parte local, pero de nuevo el Betis estuvo apunto de lograr adelantarse en el marcador con un gran disparo de Matilla que fue desviado a saque de esquina por el portero vasco. La segunda parte siguió por los mismos derroteros que la primera. Los de Valverde insistían una y otra vez pero fallaban siempre. Hasta un penalti le paró Sara a Beñat. El portero argentino se lució en un disparo de Susaeta instantes antes del gol bético. Tras un saque de esquina, el balón le llegó a Molina. El remate del alcoyano lo desvió Iraizoz, pero el rechace lo envió el delantero bético al fondo de la red. El resultado era injusto, pero bendita injusticia. Sin embargo, el Athletic no se desmoralizó y siguió buscando el gol del empate. Llegó éste tras un servicio de Beñat que cabeceó De Marcos. No se conformó con el empate el conjunto de Valverde, que volvió a marcar en otro cabezazo, esta vez de San José. Al final tuvo Jorge Molina el empate en sus botas, pero el balón acabó en el palo de la portería vasca.

El mal partido del Betis debe servir para que el equipo reaccione el domingo ante el Villarreal. Otro tropiezo sería preocupante, aunque estemos en los primeros compases de la temporada.

LO MEJOR: el partidazo de Sara.

LO PEOR: que nunca el equipo dio la sensación de poder competir frente al rival. 

Atasco caluroso e impreciso

Real Betis Balompié 0 – Granada C. F. 0

Como en la Europa League, el Betis volvió a empatar a cero aunque mereció ganar el partido. La falta de puntería, la lentitud en la elaboración del juego y un sol de justicia fueron los protagonistas del encuentro.

Contrario a lo que ocurrió frente al Valencia, la presión del equipo de Mel no fue tan contundente y eficaz. Tuvo que tocar más la pelota porque el rival renunció a ello e intentó conservar el punto desde el primer minuto, esperando a coger al Betis en un renuncio para llevarse los tres puntos para Granada. Salvo en un par de ocasiones mediada la segunda mitad, jamás el conjunto entrenado por Lucas Alcaraz llevó peligro alguno en sus ataques. Fueron los verdiblancos los que tuvieron más ocasiones de gol, pero la puntería se derritió bajo el calor sofocante del mediodía en Heliópolis. Molina, Salva Sevilla, Cedrick y Verdú tuvieron las más claras, pero no acertaron a meterla entre los tres palos. El juego del equipo fue lento e impreciso, facilitando así la labor defensiva del Granada. La entrada de Verdú dio más fluidez y verticalidad al ataque bético, pero no fue suficiente para lograr la victoria.

El jueves en Bilbao, ante un rival que ofrecerá más espacios y en un terreno de juego digno de Primera División, tendrá el Betis la oportunidad de lograr la victoria que hoy, por ser el que más lo intentó, debió conseguir.

LO MEJOR: la solvencia de la defensa bética.

LO PEOR: las oportunidades falladas que impidieron la victoria.